lunes, 27 de mayo de 2013

Alice Weil




Paisajista, nacida en San Francisco (California) en 1950. Cuando tenía dos años, se mudó con su familia a las colinas rurales de Redwood City, California. A muy temprana edad recibió la influencia artística de un pintor paisajista, amigo de la familia: Pierre Signa.
Ha recibido clases de arte en la secundaria y la universidad. Recientemente estudió con la Academia de Pintores California.
Es miembro de pintores al óleo de América, la Asociación de Arte de Los Gatos, La Sociedad de Artistas occidentales y Bay Area Contemporáneo Plein Air Circle (BACPAC).
He presentado sus obras en numerosas exposiciones colectivas e individuales, recibiendo numerosos premios, incluyendo "Best of Show".
Mis pinturas están en colecciones privadas en todo Estados Unidos, Canadá y Europa.
Podéis encontrar más información y ver más cuadros en su página web:  http://aliceweil.com




































jueves, 23 de mayo de 2013

Alan Feltus



Cualquiera que se haya iniciado en la pintura considera un gran combate enfrentarse a un simple bodegón. En esta batalla uno puede resultar malherido por tener que manejar las traicioneras armas del dibujo, la combinación de colores, las luces y las sombras que bañan los objetos, las luces reflejadas, y tantas y tantas cosas como hay que controlar para que nuestro trabajo artístico tenga un mínimo de prestancia y credibilidad.
Todo esto ocurre cuando, en los inicios del trabajo artístico, nos enfrentamos con una naturaleza muerta; pero cuando avanzamos un poco y el combate nos lleva al enfrentamiento, cuerpo a cuerpo, con el retrato o con el desnudo, la batalla se convierte en una guerra total, con muchos más frentes de los que éramos capaces de imaginar al iniciar la tarea.
En el desnudo, la cantidad de músculos que producen un contorno sinuoso, o la cantidad de huesos que presionan sobre la piel, a lo que hay que añadir la propia textura y color de la piel, distinta en cada individuo  convierten la pintura en del desnudo en una especialidad de la pintura con dificultades añadidas.
Hoy os traigo a Alan Feltus, pintor figurativo, nacido en Washington en 1943 y que se formó en la Cooper Union y en la Universidad de Yale. Está casado con la pintora Lani Irwin. Dicen que su pintura “tiene sus raíces en el arte icónico del Renacimiento italiano, pero tiene un aspecto atemporal, melancolía relacionada con el Modernismo. Sin embargo, su fascinación por los maestros italianos antiguos y la cultura de Italia, le inspiró en 1987 para comprar una granja cerca de Asís, Italia y se convirtió en un residente permanente” durante los últimos quince años.
Sus pinturas son muchas cosas y al mismo tiempo de nada más que la propia pintura, sin contenido narrativo, que no cuentan historias, lo que produce un sinfín de lecturas posibles. Son imágenes tranquilas con significados tácitos, difíciles de alcanzar, que crean un cierto estado de ánimo.